El motociclista aventurero que nunca muere

Por Cristóbal Chen

La historia del recorrido del médico argentino y revolucionario, Ernesto “Che” Guevara por la mayoría de los países de Sudamérica, es un hecho insólito que llamó mucha la atención de mi pequeña hija Cristina.

Esta niña de nueve años y yo, juntos observamos con detención la película “Diario de Motocicleta”, que relata el recorrido realizado por Guevara hace varias décadas por Argentina, Chile, Bolivia, Perú, Colombia y Venezuela. “¿Era un aventurero?, me preguntó Cristina, al ver el majestuoso film grabado por uno grande del cine estadounidense, Robert Reford.

Al transcurrir la película y ver la jocosidad del mejor amigo del “Che”, el inmenso Granados, la pequeña pudo confirmar que el médico argentino fue un hombre grande, con mente visionaria y aventurera, que pensó parecido al libertador Simón Bolívar, sobre una América Unida y sin fronteras.

Una y otra vez, Cristina me preguntó, si era un hombre bueno, porque lo mataron? Y es que en 1967, fue el comando de un ejército de un país sudamericano en complicidad con algunos malos estadounidenses, quienes asesinaron a este líder de la revolución latinoamericana en la selva de Bolivia.

Considero que es bueno darle profundas enseñanzas de hechos históricos a nuestros hijos para que nadie les eche cuento y mentiras cuando sean mayores de edad, así como hicieron mis padres, al inculcarme sólidos principios cristianos y verdaderos valores humanos.

Estas historias ricas en culturas son las que se deben difundir a la población, en vez de transmitirse basuras de programas enlatados y telenovelas que representan en algunas ocasiones malos ejemplos para nuestros hijos.

Hay que ver que algunos medios de comunicación social han perdido su norte de educar por estar pensando en el bendito rating, lo que afecta a nuestras sociedades y es por eso, que somos presas de la delincuencia, el narcotráfico, la corrupción y otros males que aquejan a las comunidades.

Gracias a Dios cuento con la tecnología del internet con buenas bocinas adaptadas a mi equipo para observar junto a mi pequeña Cristina contenidos de alto valor educativo como la historia del Che Guevara que estoy seguro hoy día no se enseña ni en los mejores colegios privados.

“Educa al niño para que tengamos mejores hombres”, es una frase muy valiosa que debería aplicarse a diario en el núcleo familiar con el fin que nuestras sociedades sean mejores libres de drogas, secuestros, violaciones de los derechos humanos, robos, estafas y toda clase de crímenes.